ECONOMÍA CIRCULAR IMITA A LA NATURALEZA

¿Economía Circular o Reciclaje?

El tema del calentamiento global, la contaminación del medio ambiente, el desgaste y escasez de los recursos naturales han dado pie a lo que hoy llamamos el reciclaje.

El reciclaje consiste en la re utilización de ciertos productos, ya sea dándoles otros usos para lo cual la creatividad del ser humano es ilimitada.

Muchos son los ejemplos; desde llantas de automóviles que son utilizados para hacer macetas o bien son la base para hacer muebles o las botellas plásticas utilizadas para fabricar otro tipo de productos.

PERO ¿QUE ES ECONOMÍA CIRCULAR?

Este tipo de economía basa su pensamiento en imitar a la naturaleza en donde se aprovechan al máximo los recursos y en donde nada se desperdicia.

Es decir, este tipo de economía trata de redefinir a la empresa, sus productos o servicios de tal forma que se erradique o minimice el desperdicio con modelos de producción que imiten a la naturaleza.

Son muchas las empresa y emprendedores con innovaciones e ideas que ciertamente han ayudado al mundo. Sin embargo, no son considerados una economía circular, más bien tiene una economía líneal.

Es decir, sus procesos de producción son una parte del círculo.

EXISTEN EMPRESAS DE ECONOMÍA CIRCULAR

Existen varias empresas que utilizan este tipo de economía, uno de los ejemplos son aquellas plantas procesadoras de azúcar que utilizan los desechos de la producción para generar energía.

Otro son empresas cuyas ideas innovadoras en cuanto a reciclaje las llevó a tener una economía circular, tal es el caso de aquellas fábricas de bolsas de tela en las que han transformado en hilo la ropa usada y desechada y formado nuevamente tela para la elaboración de bolsas, zapatos de tela y una gran diversidad de producto.

CULTURA CIRCULAR 

Este tipo de pensamiento no se circunscribe únicamente a empresa de producción de artículos, debería ser el pensamiento de todo tipo de empresa.

Y aunque no se pueda tener en su totalidad el círculo, lo importante es contribuir y ser parte de él.

Este pensamiento también debe ser parte de la cultura del hogar en la que todos participen aprovechando al máximo los recursos naturales, el sol, el agua, combustibles, los desechos orgánicos, etc